Servicios de traducción jurídica certificada
¿Por qué usar nuestros servicios profesionales
de traducción de documentos jurídicos ?
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Recomendamos dos planes de traducción para clientes que busquen traducciones de carácter jurídico. Aunque nuestro plan básico es más asequible, conlleva el riesgo de que el traductor asignado no posea la experiencia y los conocimientos jurídicos necesarios para una traducción de tal importancia.
Preguntas frecuentes sobre los servicios de traducción jurídica
Nuestros traductores jurídicos son expertos en su campo, además de nativos en su idioma, por lo que pueden ofrecer traducciones de documentos jurídicos de diferentes clases. Hemos trabajado en la traducción de: contratos inmobiliarios, contratos laborales, licencias, patentes y marcas registradas, demandas y procedimientos judiciales, identificaciones migratorias y documentación de visados, y acuerdos de confidencialidad, entre otros.
Si bien algunos documentos jurídicos no necesitan más que una traducción simple, las empresas con una presencia internacional, por ejemplo, saben bien que la localización de sus documentos jurídicos puede ser muy importante para asegurar el cumplimiento de las leyes, regulaciones y estándares de formato locales. En muchos casos, traducir palabra por palabra no es suficiente y es posible que ciertos puntos de contratos, licencias, etc. necesiten una adaptación dependiendo del país. Por todo ello, es importante trabajar con un lingüista local familiarizado con las leyes de su país.
Al igual que el resto de nuestros traductores, nuestros traductores jurídicos se someten a un proceso de certificación para los pares de idiomas en los que trabajan. Además, poseen experiencia previa en la traducción de documentos legales o han trabajado en el sector jurídico en su propio idioma. También son extremadamente meticulosos, ya que, a diferencia de muchos otros tipos de traducción donde la interpretación puede ser algo positivo, las traducciones jurídicas deben reflejar con precisión el mensaje del texto original a la vez que se ofrece un texto idiomático y libre de errores ortográficos o gramaticales.
La mayoría de nuestros proyectos empiezan en menos de una hora desde que se han creado y hacemos todo lo posible para que se traduzcan en no más de uno o dos días laborables. En el momento del pago, verás una estimación de plazo de entrega más precisa a partir del recuento de palabras y del par de idiomas que hayas escogido. Debido a la cantidad limitada de traductores jurídicos (especialmente en ciertos idiomas), podría tardarse algo más en encontrar al traductor jurídico perfecto. Si necesitas acelerar el proceso, puedes seleccionar la opción de entrega urgente o contactar con atención al cliente para solicitarlo.